Ricardo Ten está tocado por una varita desde que en 2017 decidió subirse a la bicicleta después de dejar la natación, en la que se había labrado un palmarés excelso durante dos décadas. En seis temporadas se ha erigido en uno de los mejores ciclistas del mundo, siendo el español con más maillot arcoíris -se ha enfundado 14-, un polivalente corredor capaz de rendir al máximo nivel tanto en la pista como en el asfalto. El valenciano ha firmado un Súper Mundial en Glasgow con seis medallas, tras ponerle el broche con una plata en la ruta C1.
Llegaba lanzado después de conquistar la presea dorada en la contrarreloj, la disciplina por la que más había apostado este año, focalizando sus entrenamientos en ella, con vistas también a los Juegos Paralímpicos de París 2024. Defendía la corona mundial en la prueba de fondo, pero esta vez no pudo con el chino Weicong Liang, que se impuso en el sprint final tras una carrera pasada por agua y con mucho viento.
En la primera de las cuatro vueltas (62,4 kilómetros) en el circuito de la región escocesa de Dumfries & Galloway, el español rodó en un grupo formado por diez ciclistas. Poco a poco el pelotón se fue desmenuzando, quedándose en cabeza Ten, el asiático, el estadounidense Aaron Keith y los alemanes Michael Teuber y Pierre Senska. El valenciano, muy vigilado por sus rivales desde la salida, fue el encargado de neutralizar los intentos de fuga de Liang.
Hasta que en la última vuelta ambos se escaparon para librar una dura pugna. Cuando ya oteaban la meta, Ten lanzó un ataque, pero el ciclista chino le dio caza para llevarse el oro. “Han estado todos pendientes de mí e intenté tapar los huecos de una manera progresiva, siempre me dejaban esa responsabilidad cuando el chino atacaba. Hasta que dije que o remábamos todos o se iba. En uno de esos relevos me marché con el alemán -Teuber-, después le solté y me puse a remar con el chino, fuimos a relevos hasta la meta, donde me precipité con un ataque”, ha explicado.
Sensacional Mundial el que ha completado Ricardo Ten en Glasgow. En el velódromo Sir Chris Hoy se colgó cuatro preseas: oros en scratch y ómnium, plata en persecución tres kilómetros y bronce en la velocidad por equipos junto a Pablo Jaramillo y Alfonso Cabello. Y en la carretera ha añadido dos más, un oro en la contrarreloj y una plata en la ruta. La próxima semana buscará también un doblete en el Europeo de Rotterdam.
Por otro lado, un quinto puesto logró el coruñés Damián Ramos en C4 (2:17.21) al llegar al sprint con tres corredores más, siendo el británico Archie Atkinso el que se llevó el bronce. En la misma clase, Julio Enrique Bermejo quedó undécimo (2:26.57). En C2 Luis Javier Arcega fue sexto (1:35.47), a 24 segundos del bronce, y Maurice Eckhard acabó en el puesto 12 (1:45.58). En C3 el aragonés Eduardo Santas fue décimo (1:35.17), mientras que en tándems, noveno puesto para Joan Sanso-Fran Rus y décimo para Christian Venge-Eloy Teruel.