El Mideba sabia del peligro de Getafe, pero no del cuadro arbitral, quien desde el primero momento quiso tomar el protagonismo del partido, en lugar de los equipos.
Liga de baloncesto en silla de ruedas
División de Honor
15º Jornada
EMSV Getafe 83 – Mideba Extremadura 47
Parciales: 26-10; 18-20; 19-9; 20-8
Mideba Extremadura. Jornada que se presentaba clave para el equipo extremeño, de cara a finalizar segundo en la liga. El rival todo un grande con jugadores de solvencia, y que a pesar de tener un inicio liguero dudoso, en esta recta final han sabido reponerse obteniendo resultados positivos para su intereses.
El Mideba que comenzó el partido algo perdido, quizás confiado por la última victoria conseguida, encajo un parcial de 8-0, donde las pérdidas de balón eran aprovechadas de forma esplendida por los locales. Pero desde esos minutos iniciales la pareja arbitral decidió tomar el protagonismo, con decisiones más allá lo dudoso en momentos claves de para los interés de los extremeños. Al finalizar el cuarto Getafe obtenía una renta de 14 puntos, y el Mideba veía como Hugo Lorenço acumulaba cuatro personales, dos de ellas vistas exclusivamente por los árbitros.
Para el segundo cuarto Hugo se queda en el banquillo a favor del también portugués Marcos Gonçalves. Pero lo extremeños acusaron la ausencia de un hombre de las características de Hugo, y el partido había entrado en una dinámica difícil de remontar, sobre todo teniendo en cuenta las decisiones arbitrales.
El tercer cuarto con partido roto por completo poco podía hacer los extremeños que intento hacer todo lo posible para aguantar el tirón de los locales.
El último periodo tenía reservada sorpresa para el Mideba y que es se señala técnica y antideportiva a Eusebio, en una nueva espectacular intervención arbitral, abandonando la cancha.
Partido para olvidar, sobre todo a la pareja arbitral, y que de cara a la próxima jornada deja muchas por decidir.
Así la siguiente jornada habrá partidos muy interesantes, el Mideba recibira al colista al que debera ganar si quiere quedarse en propiedad esta segunda posición, a la que a pesar del deseo de algunos sigue conservando.