Cofidisconlosparalimpicos.com – En Villanueva nació un interés por dar el salto a la disciplina paralímpica y a través del seleccionador nacional, Félix García Casas, comenzó a correr con Porto.
Ambos ciclistas comenzaron a pedalear beneficiándose de su cercanía geográfica, lo que les permitía compaginar entrenamientos y trabajo; de lo contrario les sería imposible progresar en el tándem. A estas alturas, sus amigos y familiares ya los consideran una especie de ‘matrimonio ciclista’.
Porto tiene una deficiencia visual de nacimiento y trabaja en la ONCE. El trabajo y el apoyo de esta institución a los deportistas paralímpicos le permite solicitar las excedencias necesarias para entrenar y competir en la élite sin que esto afecte a su actividad laboral y sus aspiraciones como ciclista.
En esta primera parte de la entrevista nos cuentan sus comienzos en el ciclismo. Porto lo resume muy bien cuando recuerda los golpes que se pegaba empeñado en subir a la bici emulando a Álvaro Pino: no puedes obligar a un niño a que no se suba a la bici.
