A veces por talento, otras por inercia, garra y corazón. Lo cierto es que el Amiab Albacete está tejiendo una historia de amor perfecta con la Champions Cup, la competición de clubes más prestigiosa del baloncesto en silla de ruedas. Es un equipo con hechizo en este torneo, nadie cuestiona su reinado. Por tercer año consecutivo ha conquistado el título, acentuando aún más su dominio. En 2022 fue en Erfurt (Alemania), en 2023 en Bemmel (Países Bajos) y ahora en casa, en el Pabellón Lepanto, al abrigo de su hinchada, ha dejado huella y ha escrito otra página dorada. Lo ha hecho tras vencer al Thuringia Bulls (70-64), que se rindió de nuevo ante la evidencia y la rutina ganadora del conjunto español dirigido por Abraham Carrión.
Los manchegos debutaron a nivel continental hace nueve años consiguiendo alzar la Euroliga 3, trofeo que volvió a ganar en 2016. Un año después fue campeón de la Euroliga 2. Y en las tres últimas temporadas no hay quien les haga sombra en la Champions. Ha igualado un récord que tienen otros tres equipos: Verkerk Zwijndrecht holandés (1991-1993), CS Meaux francés (1999-2001) y RSV Lahn Dill alemán (2004-2006). Pasaron el rodillo al CD Ilunion (81-56) en las semifinales y luego superaron a los germanos, en la reedición de la final del pasado curso. El amanecer del partido fue muy igualado, con poco acierto y las defensas funcionando a toda máquina.
El marcador en el primer cuarto reflejó un paupérrimo 10-8. Los locales se nutrieron de los puntos de Mateusz Filipski para lograr la primera ventaja. En el segundo acto ambos sacaron sus mejores armas y el duelo subió de ritmo e intensidad, sin darse tregua. El catalán Jordi Ruiz afinó su fusil y lideró la reacción del Thuringia, escoltado por Karlis Podnieks, Jens-Eike Albrecht y Aliaksandr Halouski. El Amiab no se amilanó y acudió con brío al intercambio de golpes, con buenas acciones de Phil Pratt, con la fortaleza física de Lee Manning en la pintura y con las travesuras de un desatado Filipski. Al descanso, máxima igualdad (30-30).
A la vuelta de vestuarios se pusieron por delante los alemanes con las canastas de Joakim Lindén y de Halouski (32-34), pero respondió Amiab con un parcial de 7-0 liderado por Pratt, Ben Fox y Manning. En ventaja y con mejor armadura, Albacete no aflojó, había olido la sangre. Sólidos en defensa, en ataque se mostró certero con el polaco Filipski martilleando una y otra vez el aro, y con el británico Manning generando ventajas en el poste bajo gracias a su envergadura. Vahid Gholamazad le dio oxígeno a los suyos en el tramo final del tercer cuarto, que acabó con 53-45 para los manchegos.
Parecía despegar el equipo de Abraham Carrión en los primeros minutos del último cuarto con los puntos de Ben Fox, Charlotte Moore y Manning (60-48), pero Thuringia Bulls no claudicó y regresó con furia a la batalla con un parcial de 0-10 (60-58) con dos triples seguidos de Halouski. Sin embargo, apareció de nuevo Filipski para templar los nervios (64-60). Arie Twigt y Marie Kier le ponían emoción al partido a menos de un minuto (66-64). Cuando más quemaba el balón, Manning se agigantó para anotar y en la siguiente jugada cazar un rebote crucial. Desde el tiro libre, Filipski y Pratt (70-66) amarraron la tercera corona europea de Amiab. Punto y seguido a este Albacete ya de leyenda, con tres Champions para su museo, que no para de crecer en los últimos años. Y va a por más, ya que aún le queda la Liga.
Ficha técnica del partido:
Amiab Albacete BSR (70): Charlotte Moore (4), Alejandro Zarzuela, Lee Manning (19), Mateusz Filipski (32), Phil Pratt (7), Ben Fox (8), Fran Sánchez Lara, Harris Brown, Óscar Onrubia, Alexis Ruiz y Vicky Pérez.
Thuringia Bulls (64): Vahid Gholamazad (9), Marie Kier (4), Jens Albrecht (8), Aliaksandr Haluoski (12), Joakim Lindén (14), Karlis Podnieks (3), Jordi Ruiz (10), Driss Said (2), Hubert Hager y Arie Twigt (2).
Parciales: 10-8, 20-22, 23-15 y 17-19