Cuando cruzó la meta y vio reflejado su nombre en las pantallas del estadio Charléty de París, irrumpió la locura en Sara Andrés. Saltos, aplausos, lágrimas de emoción y en el rostro esa dulce sonrisa que siempre enarbola la madrileña. El motivo, la medalla de plata que acababa de conseguir en los 100 metros T64 (deportistas amputadas por debajo de la rodilla) en el Mundial. Un logro que conlleva también el billete directo para los Juegos Paralímpicos de 2024.
La atleta española, de carácter irreductible, desplegó su mejor versión sobre el tartán azul para llevarse una presea trabajada y muy anhelada, ya que en Dubái 2019 se quedó a las puertas con un quinto puesto y en los Juegos de Tokio 2020 fue séptima. Es el tercer metal mundialista que cosecha en su carrera, en Londres 2017 subió al podio con dos bronces en 200 y en 400 metros. Ambas pruebas las eliminaron del programa paralímpico y Sara tuvo que resetear y pasarse a los 100 metros y al salto de longitud.
Precisamente, sobre el foso de arena fue sexta en este campeonato del mundo. Su apuesta más firme estaba en la prueba reina de la velocidad, en la que se veía fuerte esta temporada. Ya mandó un aviso a sus rivales en las eliminatorias, obteniendo la segunda mejor marca de las diez participantes con 12.95 segundos. Casi ocho horas después volvía a aparecer pizpireta por el estadio parisino.
Ya en los tacos de salida, con un semblante más serio y concentrado, desde la calle 6, escoltada a ambos flancos por las holandesas Kiki Hendriks y Kimberly Alkemade, tuvo una salida rápida y gracias a su capacidad de aceleración, a mitad de carrera con sus veloces zancadas superó a varias rivales para alcanzar la plata con un tiempo de 12.83 segundos. El oro fue para la holandesa Fleur Jong (12.47) y el bronce para la canadiense Marissa Papaconstantinou (12.95).
«Estoy feliz, contenta y agradecida a mi entrenadora Sara Montero, que ha creído en mí y ha trabajado conmigo durante estos dos años. Gracias también a Cantabria Labs y Sanitas que son las empresas que han confiado en mí y por ello llevo cuatro años dedicándome solo al deporte y por fin da sus frutos. También a mi ortopeda, a mi nutricionista, a mi fisio y a todo mi equipo. Es el broche de oro a mucho sufrimiento, esfuerzo y trabajo, de sentirte a veces que no lo vas a conseguir, pero con constancia y perseverancia se logran cosas bonitas. Ahora con ganas de trabajar para comerme los Juegos Paralímpicos de 2024», ha explicado.
La plata se convierte en el lauro más preciado de su palmarés, un resultado esperanzador de cara a París 2024 para Sara Andrés, a quien nada frena su ambición, tesón y osadía. España ya suma nueve medallas en este Mundial: oro en 5.000 metros T13 y plata en 1.500 metros de Yassine Ouhdadi; oro en 200 metros T13 y plata en 100 metros de Adi Iglesias; plata de Gerard Descarrega en 400 T11; y bronces de Álvaro del Amo en lanzamiento de peso F11, Joan Munar en salto de longitud T11 y Judith Tortosa en 100 metros T72 Frame Running.
Yassine Ouhdadi completa su gran Mundial con una plata en 1.500 metros
Una imparable Adi Iglesias alcanza el oro mundial en 200 metros
Gerard Descarrega logra la plata en 400 metros T11 en el Mundial
Álvaro del Amo, bronce mundial en lanzamiento de peso
Una milésima deja a Adi Iglesias sin el oro mundial en los 100 metros
Yassine Ouhdadi se corona campeón mundial en 5.000 metros
Joan Munar vuela hacia el bronce en el Mundial de París
Judith Tortosa sorprende con un bronce mundial en Frame Running