El bádminton español continúa su preparación para el Mundial de noviembre en Tokio y en el último test, el Internacional de Uganda, se ha llevado cinco medallas (dos oros, dos platas y un bronce) y la mochila cargada de confianza e ilusión. El torneo, de nivel 3, ha servido para acumular rodaje antes de afrontar el campeonato del mundo en territorio japonés, que será un reto mayúsculo para una selección que buscará hacer un buen papel y sumar puntos en la carrera clasificatoria hacia los Juegos Paralímpicos de París 2024.
En Kampala, uno de los volantistas destacados ha sido Paco Motero. El onubense, que en el mes de julio subió al podio con un bronce en Irlanda, ha conquistado dos metales. En individual WH1 (deportistas en silla de ruedas) lideró el grupo B con victorias ante el marfileño Djenon Emmanuel Djah (21-6 y 21-6) y el ugandés Samuel Waiswa (21-8 y 21-10). En semifinales cedió con el indio Shashank Kumar (17-21 y 13-21) y se colgó el bronce.
En dobles mixto WH1-WH2, formando dupla con la egipcia Shaimaa Samy, ha conquistado la presea dorada. Comenzaron con dos triunfos frente a los locales Kevin Mubiru y Flavia Basuuta (21-4 y 21-5) y los indios Kumar y Ammu Mohan (21-14 y 21-18), a los que también derrotaron en semifinales (21-15 y 21-15). En la final, con otra pareja hindú, Neeraj Kumar-Shabana Shabana, se impusieron por 21-5 y 21-11.
Otro metal de oro ha conseguido el joven Iván Segura en categoría SH6 (jugadores de baja estatura). El granadino, que en mayo sumó un bronce en dobles en el Internacional de Baréin, venció a sus tres rivales indios en un grupo único para subir a lo más alto del podio: 21-9 y 21-12 a Gokul Das Areeparamb, 21-8 y 21-14 a Akash Sethu y 21-15 y 21-19 a Balasubramanian Rajkumar.
Precisamente, con este último deportista formó pareja en dobles y logró una plata. “Siento mucha alegría, se ha dado un torneo bastante bueno, ganando todos los partidos individuales en dos sets. Me encuentro aún en una fase de aprendizaje, pero esto supone un plus para encarar la preparación del Mundial, voy por el buen camino y este resultado refuerza el trabajo. El objetivo en Tokio sería pasar de grupos en individual y en dobles mixto”, ha explicado Segura, de 17 años.
Su compañera en el Club Bádminton Granada, Cristina Sánchez de Lechina, también ha alcanzado la primera medalla internacional de su incipiente carrera. La andaluza consiguió la plata en categoría SU5 (discapacidad en las extremidades superiores). Fue primera en su grupo tras ganar 21-17 y 21-15 a la ugandesa Ritah Asiimwe y 21-8 y 21-12 a la africana Ketsia Iman Kolika. En semifinales superó a la también ugandesa Sumini Mutesi (21-16 y 21-17) y en la final perdió con la india Vaishali Nilesh (15-21 y 17-21).
En dobles mixto, junto a Jaime Polo, ganaron dos encuentros en la fase de grupos y cayeron en cuartos de final (11-21 y 3-21) con la escocesa Mary Margaret Wilson y el indio Sreeram Muthuraman. “Esta medalla supone muchísima satisfacción al ver como el trabajo diario por fin va dando sus frutos. Aún no me lo creo. Empecé en bádminton hace menos de dos años y con tantos parones debido a las restricciones por la pandemia se ha hecho muy difícil acudir a los entrenamientos y ha sido este último año cuando he podido tener continuidad”, ha comentado.
“Ahora mismo estoy en un punto de aprendizaje y crecimiento, tengo un camino largo. Soy consciente de que llevo poco tiempo y al Mundial irá gente con mucho nivel, pero estamos trabajando para dar lo mejor de mí y llegar todo lo lejos que se pueda. El objetivo es disfrutar al máximo y luchar cada punto en la pista”, ha recalcado la granadina.
Por su parte, el gijonés Pablo Serrano quedó entre los ocho mejores en categoría SU5. Cayó en cuartos de final ante el cabeza de serie número uno, el singapurense Wei Ming Tay, por un doble 14-21. Mientras que el toledano Jaime Polo, quien regresaba a la competición tras un paréntesis de dos años en su trayectoria deportiva, en su primera experiencia internacional cayó en octavos de final 13-21 y 15-21 frente al ugandés Godfrey Katalo en clase SL3.