La selección masculina se salva de la quema del descenso tras vencer por 10-3 a Grecia en el campeonato disputado en Rostock (Alemania).
Jesús Ortiz / dxtadaptado.com
Estar en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020 parecía un objetivo irreal, una quimera para la selección española masculina de goalball. En el Europeo A de Rostock (Alemania), los pupilos dirigidos por Paco Monreal se jugaban algo más importante, mantenerse en la máxima categoría continental de este deporte tras subir a la élite el año pasado. Con mucho esfuerzo, trabajo y goles, España ha evitado la quema del descenso tras vencer por 10-3 a Grecia en el partido decisivo.
El campeonato no comenzó bien para los españoles, que cayeron por 9-4 frente a los anfitriones en el debut y al día siguiente tampoco pudieron hacer nada ante la Finlandia (5-11) de Erkki Miinala. La única victoria en la fase de grupos llegó en el tercer encuentro con la República Checa por un ajustado 6-5. España se adelantó con un gol de Félix Vargas pero se topó con infortunio y llegó a ir perdiendo por 1-4. Los dobletes de Nicolás Verdejo y de Javi Serrato y un gol más de Vargas les daba el triunfo (6-5) y salvaban el primer ‘match ball’ ya que el último clasificado del grupo descendía.
Unas horas después España perdía por un contundente 1-8 con Bélgica. En cuartos de final, Ucrania apenas necesitó 12 minutos para imponer su dominio (0-10). Los de Monreal pelearían del quinto al octavo puesto. Otra derrota con Bélgica por 2-7 les obligaba a ganar a Grecia para evitar el averno. España empezó bien, con tres goles de Félix Vargas para tomar la iniciativa (3-1) al descanso.
En la reanudación, varios desajustes defensivos permitieron a los griegos igualar la contienda (3-3). El conjunto español no perdió la concentración y desplegó su mejor versión en ataque con una gran efectividad. Vargas hizo dos tantos más y el sevillano Javi Serrato, con cuatro goles seguidos, sentenciaban el choque. El debutante Juan Carlos García cerró la goleada (10-3) y la séptima posición de España en el campeonato continental.
«Veníamos como los décimos del ranking y nos marchamos siendo séptimos de Europa. Lo de Tokio 2020 sabíamos que era muy complicado, pero donde no queríamos ir era a Israel el próximo año, lugar en el que se disputará el Europeo B. Lo que nos falta es rodaje, nuestros rivales van a muchos torneos y necesitamos jugar más. Aún así, hemos mejorado el resultado de Kaunas 2015, en el que perdimos todos los partidos. Es un buen logro, ya que Ucrania, que ha llegado a la final, le ha costado casi 10 años mantener la categoría», ha explicado Serrato.
