Hace un par de meses su futuro en la halterofilia adaptada era incierto, lo tenía todo en contra, pero David Gómez es un deportista que nunca claudica, es sinónimo de constancia y carácter indomable. En Sharm El Sheikh (Egipto) ha vuelto a resurgir tras conquistar una medalla de plata en la Copa del Mundo en categoría -49 kilos. Con este resultado, el canario se mete en la pelea por estar en los Juegos Paralímpicos de París.
En el press de banca en territorio egipcio desplegó su potencial para alzar la barra con 145 kilos, que supone nuevo récord de España. En los dos intentos anteriores había levantado 135 y 140 kilos. El español, que nació con síndrome de regresión caudal, que le afectó a la médula y al crecimiento y movilidad de sus piernas, subió al podio en el total paralímpico al lograr la plata con 420 kilos. Este resultado le sitúa cerca de la marca necesaria para los Juegos de París.
“Mi futuro estaba un poco en el aire. Finalmente, si pude ir a Egipto y aprovechar el buen momento de forma en el que estaba. Hemos cumplido el objetivo de acercarnos a los puestos de clasificación directa y vamos a pelear hasta el final porque estamos muy cerca. La medalla es un premio más a la constancia y al trabajo que venimos haciendo estos meses. Estoy muy contento, satisfecho y con ganas de más porque no vemos techo”, ha comentado.
En la capital francesa también espera estar Loida Zabala, que sigue en plena lucha contra el cáncer de pulmón que le fue diagnosticado en noviembre, con metástasis en cerebro, hígado y riñón. Los tumores cerebrales desaparecieron en diciembre y le permitieron volver a los entrenamientos. En febrero ganó el Campeonato de España en otra categoría ya que retuvo líquido con los corticoides que había tomado y pasó de -50 a -61 kilos, peso en el que acaba de competir en la Copa del Mundo de Egipto.
Antes de viajar le dieron una mala noticia ya que en el último TAC de cerebro que le realizaron han visto que tiene un residuo tumoral que parece que ha sangrado. Una de sus oncólogas no le recomendó volar en avión, pero la extremeña ya tenía tomada la decisión. La campeona de Europa y cuatro veces diploma paralímpico (Pekín 2008, Londres 2012, Río 2016 y Tokio 2020) ha completado una buena actuación en Sharm El Sheikh tras quedar en cuarta posición en la final B.
Levantó 70 kilos, después le dieron nulo con 75 kilos, un peso que sí pudo superar en el tercer intento. Solo fue superada por la egipcia Fatma Elhassan (79), la puertorriqueña Neslie Bernardi (78) y la georgiana Gvantsa Gulordava (76). En el total paralímpico terminó en el tercer puesto con 145 kilos. Loida ha tenido que participar en dos categorías por encima de la suya porque el tratamiento contra el cáncer le está dificultando bajar de peso, aunque en junio en la Copa del Mundo de Tbilisi (Georgia) lo hará en la de -55. La de Losar de la Vera tiene claro que quiere estar en París este verano.
“Ha sido una competición diferente, he estado tremendamente feliz por venir con mi entrenador, Óscar Sánchez, aunque no me siento al 100% satisfecha con cómo he competido. El primer y tercer levantamiento han sido perfectos, no me han pesado nada y por ello sé que estaba preparada para levantar 80. Sin embargo, en el segundo no me he colocado bien, ni me he activado lo suficiente, errores que me han llevado a realizarlo con una técnica muy por debajo de la que suelo hacer. Soy consciente de que sólo veníamos a participar ya que, desde el diagnóstico del cáncer, tuvimos que empezar de cero, pero necesitábamos competir para terminar la ruta de competiciones exigidas para los Juegos de este año”, ha recalcado.