Arranca la temporada en la piscina y en la primera competición importante, los nadadores han ofrecido un buen nivel en el Trofeo Internacional de Castalia, una prueba inclusiva en la que han caído las primeras mínimas para estar en el Mundial que se celebrará en Manchester en agosto de 2023. Un campeonato en el que la selección española buscará igualar el botín logrado este año en la edición de Funchal -29 medallas- y sumar plazas para los Juegos Paralímpicos de París 2024.
Algunos ya han alcanzado esas marcas exigidas para estar en la cita del Reino Unido del próximo verano. En Castellón, que ha servido de pistoletazo para el nuevo curso, hasta 15 deportistas han logrado acreditar los tiempos para acudir al Mundial. Por parte de los nadadores de la Federación Española de Deportes de Personas con Discapacidad Física (FEDDF), Toni Ponce destacó en 100 braza SB5, prueba en la que es el vigente campeón del mundo, tras parar el crono en 1:28.04.
“Estoy muy satisfecho, primera competición de la temporada y en Castellón, que supone un plus más porque compites con gente convencional y eso es un extra. A nivel particular muy bien, las mínimas eran asequibles, con buenas conclusiones en las principales pruebas. En cuanto al equipo que formamos en el CAR Sant Cugat hemos hecho mínimas casi todos, así que muy contentos”, ha apuntado.
Entre los compañeros que entrenan junto a él a las órdenes de Jaume Marcé, también han conseguido mínimas Núria Marquès en 100 espalda S9 (1:10.63), Óscar Salguero en 100 braza SB8 (1:12.60), José Antonio Marí en 100 mariposa S9 (1:02.12) y Jacobo Garrido en 400 libre S9 (4:18.76). Al igual que lo hizo Íñigo Llopis en 100 espalda S8 (1:07.55), prueba en la que ganó la plata paralímpica y mundial: “Muy feliz con la clasificación, eso te da tranquilidad para preparar el año, y también porque en las tres pruebas estuve cerca de mis mejores marcas de la pasada temporada. Ya entramos en esa dinámica de competición, ahora a continuar entrenando y trabajando para hacerlo lo mejor posible en el Mundial de Manchester”.
Nahia Zudaire lo logró en 100 braza SB7 (1:41.83), que supone nuevo récord de España. “No es una prueba en la que me esperaba clasificar ya que no me centré en ella hasta la pasada temporada, así que contenta con ese tiempo. El 400 es mi prueba favorita, por lo que buscaré esa clasificación en las próximas semanas”, ha explicado la donostiarra. Y la joven Tasy Dmytriv en 100 braza SB8 (1:22.99), en la que ganó el oro mundial en Funchal con solo 13 años.
“He hecho una buena competición, a principios de temporada empecé bien, pero tuve molestias en la rodilla que no me dejaron entrenar como me hubiese gustado. En Castellón he estado defendiéndome en el agua lo mejor posible, con una actitud animada, he conseguido ya la mínima para el Mundial, así que contenta con los resultados. Ahora toca seguir, espero alcanzar las cosas que tenemos planteadas este año”, ha recalcado la almeriense entrenada por Patricia Prieto en el Club Mare Nostrum.
Por parte de la Federación Española de Deportes para Ciegos (FEDC), la aragonesa María Delgado brilló con dos mínimas en 100 libre S12 (1:02.32) y en 100 espalda S12 (1:13.89). “Estoy contenta con haber podido hacer la mínima para el que será mi sexto Mundial. Estamos todavía a principios de temporada y hay que seguir trabajando, pero estamos en el camino”, ha apuntado la zaragozana.
El valenciano Kike Alhambra también logró dos en las pruebas de 100 mariposa (59.73) y 100 espalda S13 (1:02.07). “Me siento confiado al haber conseguido ya dos mínimas del Mundial tan temprano y tras estar tan cargado de metros con los entrenamientos en Sierra Nevada. Con buenas sensaciones para el resto de la temporada y con ganas de hacer mejores tiempos”, ha afirmado.
A ellos se les sumaron Álex Villarejo en 100 braza SB12 (1:13.07), Marian Polo en 100 braza SB13 con 1:23.41, que es nuevo récord de España, Iván Salguero en 100 libre (54.66) S13, Emma Feliú en 100 braza SB13 (1:24.34) y José Ramón Cantero en 100 libre S11 (1:01.38). “Estaba entrenando súper bien, pero hace un par de semanas me puse malo y aún lo estoy arrastrando, aunque bastante contento porque he cumplido el objetivo de hacer mínima para el Mundial y, además, he ganado el 100 libre. Ahora pararé unos días y después a preparar el campeonato del mundo”, ha indicado el madrileño.
Por otro lado, los nadadores del Club Natación Pozuelo, Beatriz Lérida e Ignacio Arribas, han derribado barreras hacia la inclusión al competir con sus equipos en la Copa Nacional de Clubes. Y lo han hecho con buenos registros, ya que la castellano-manchega ha mejorado sus marcas personas en 100 espalda, 400 y 800 libre, mientras que el madrileño ha superado sus registros en 800 y 1.500 libre. “Competir en natación convencional es un privilegio, te sientes integrada con tu equipo, te acogen, para mí más que un club, es una familia. Los resultados se vieron reflejados con este apoyo porque hice todas mis mejores marcas. Es una experiencia única y bonita”, ha comentado Lérida.