informador.com.mx – Jesús Castillo salió a competir con la firme intención de llevarse, por segunda vez consecutiva, el oro parapanamericano; los gritos de “¡Chuy, Chuy!” Y “¡Sí se puede!” hicieron vibrar el Foro de Halterofilia, la familia del tapatío se hizo presente para demostrar su apoyo al campeón.
Desde la primera ejecución, Castillo dejó clara su superioridad y levantando 200 kilogramos, se colocó en la primera posición de la competencia, y no la volvió a soltar. El estallido de júbilo de los asistentes apareció una vez más cuando en la pantalla apareció el mexicano reafirmando el sitio de honor y rompiendo su primer récord parapanamericano de la jornada, al levantar en su segundo intento 211 kilos; y esto no fue todo, pues para su tercer ejecución el campeón de Río 2007 sorprendió a propios y extraños al romper de nuevo el record parapanamericano levantando en su tercer, y último, intento 220 kilos.
“Fue impactante el apoyo del público, estuve a punto de soltar las lágrimas por la entrega de la gente. Esta medalla tiene un sabor muy especial por ser en casa, detrás de esta medalla hay mucho esfuerzo, dedicación y sudor, me preparé con conciencia y lo bueno es que lo logré”, comentó después de bajar del podio.
Castillo nació el 24 de agosto de 1984, en La Venta del Astillero, Jalisco; a los dos años enfermó de poliomielitis, enfermedad que le propició a perder la movilidad en sus piernas, a pesar de esto, el atleta nunca bajó los brazos y luchó contra todos obstáculos para cumplir sus sueños. Su vida cambió a partir del año 2000 cuando decidió incursionar en el deporte.
“Yo vi los Juegos Paralímpicos en Sidney por televisión y me llamó la atención cómo las personas con una discapacidad igual o incluso más severas que la mía, hacían deporte, y eso fue lo que me motivó a estar aquí”.
El estar en una silla de ruedas no ha sido impedimento para que el tapatío cumpla sus objetivos, no sólo deportivos sino también personales.
“Lo mejor que me ha dejado el deporte es en lo personal, una persona con discapacidad esta frustrada y bueno el deporte te ayuda a salir y conocer el mundo. Ahorita estoy tratando de terminar la preparatoria, y quiero cursar una carrera, probablemente algo que estuviera enfocado en el deporte, nutrición, psicología o algo así”.
Por el momento, Castillo tiene la mira fija en Londres 2012, cita para la cual ya tiene su lugar reservado; serán los segundos Juegos Paralímpicos en su carrera.