El atleta Gonzalo Sánchez se ha ganado un rincón en el corazón de los chicos y chicas de la Asociación Caminar de Síndrome de Down a cuyo beneficio realizó corriendo 150 kilómetros
Pilar Muñoz/ latribunadeciudadreal.es. Filipides pasó a la historia por su carrera para llevar a Atenas la buena nueva de la victoria de la batalla de Maratón. Es difícil que Gonzalo Sánchez pase a la historia, pero lo que sí es seguro es que se ha ganado un rincón en el corazón de los chicos y chicas de la Asociación Caminar de Síndrome de Down de Ciudad Real, a cuyo beneficio realizó corriendo los casi 150 kilómetros que separan Las Pedroñeras (Cuenca) de Ciudad Real.
A las 11.40 horas de ayer hizo su entrada triunfal en el polideportivo Rey Juan Carlos de la capital, donde le esperaban niños y niñas con síndrome de Down que le aclamaron como un héroe. Las miradas, sonrisas, palabras y abrazos de estos chicos y chicas emocionaron al atleta conquense que se ha marcado varios retos con el objetivo de conseguir fondos para la asociación.
Gonzalo Sánchez partió de la plaza de la Constitución de su pueblo natal, Las Pedroñeras, a las doce de la mañana del sábado, dispuesto a realizar 24 horas de carrera, 150 kilómetros. En declaraciones a La Tribuna, confesó que había pasado mucho frío, soportando temperaturas de ocho y siete grados bajo cero, y también había sentido dolor, aunque «ha habido momentos de mucha satisfacción» al llegar a los pueblos y ver a gente «dándome apoyo». La madrugada fue dura y la etapa más fatigosa «al pasar Manzanares, al sufrir una lesión en la rodilla», castigada por «tanta carga y tanto reto y por el frío. Pensé que tenía que abandonar, pero entonces el club ciclista que me acompañaba me dijo que hiciera un tramo en bici, y así lo hice durante diez kilómetros».
Una vez recuperado, continuó. «Ha merecido la pena, sobre todo al ver el cariño de los padres y oír a los chicos de la asociación llamarme héroe», dice con voz quebrada por la emoción y los ojos vidriosos.
Cuenta que esta carrera se enmarca dentro del principal reto: cruzar el Estrecho de Gibraltar a nado y en mayo, el peñón de Benidorm. En esta ocasión, todo para ayudar a la asociación Caminar.