elcomercio.es – Fran Tellado padece una discapacidad psíquica del 65%. No tiene campeonatos mundiales ni medallas en grandes competiciones pero el kárate le hizo conquistar su logro más preciado: la socialización.
Empezó a practicar este deporte en 1997 en el gimnasio Club Kárate Corvera en Las Vegas y en 2002 comenzó en el Nuevo Milenium de Avilés. Sus primeros profesores fueron Miguel Templado, Juan y Toni. Actualmente su maestro es Manolo Enjuto. Las razones por las que empezó a practicar este deporte son claras: «Me gustaban las películas y series de artes marciales y los videojuegos de lucha, leía libros y revistas sobre ello», reconoce Fran. Y es que entre sus series favoritas están ‘Aguila Roja’, ‘Street Fighter’ y ‘La Leyenda’.
Los entrenamientos iban dando sus frutos. «Según iba cambiando de un cinturón a otro y aprendía katas nuevas. La última kata que aprendí fue ‘Kanku So’, que consta de 82 movimientos. También aprendí técnicas nuevas tanto de ataque como de defensa. A veces ayudo a otros compañeros de grados bajos a preparar sus exámenes», reconoce este avilesino, que es cinturón negro de kárate.
Su entrenador es Manuel Enjuto. Su lema es «mejora tu calidad de vida» y en el caso de Fran lo consiguió. Y con creces. «Es un chico con el que hay que tener un trato especial para hacerle entender los entrenamientos que enfocamos en las distintas clases dedicadas a los katas, kumites y la autodefensa», explica Manuel Enjuto. A lo que añade que «a Fran le apasiona el trabajo cuerpo a cuerpo de lucha, con formas de tirar al suelo, controlar y reducir a un atacante, el trabajar con armas simuladas…».
Lo que más le gusta a Fran de este arte marcial es la autodefensa, llamada también ‘goshin’, también le apasionan las armas orientales como el ‘Jo’ y el ‘tonga’, añade este avilesino de 35 años.
Solo participa en katas
Debido a sus limitaciones psíquicas no puede participar en competiciones de kumite (combate) pero sí lo hace en kata (ejercicios al aire con un orden establecido y diferentes niveles de ejecución y dificultad).
«Esto lo hacemos fuera de nuestra región, pues aquí no tenemos constancia de que haya karatekas con estas limitaciones», detalla su entrenador. Lo hacen a través del kárate adaptado con chicos disminuidos físicos, síndrome de down, invidentes o en sillas de ruedas con dos clubes (El Luna de Salamanca y el Bera Bera de San Sebastián) que además de chicos españoles tienen contactos con Francia e Italia haciendo de estos campeonatos un encuentro internacional. «Hacemos una gran labor demostrando al público que estos chicos tienen una gran valía por la superación personal día a día de todas las barreras con las que se encuentran» asegura Manuel.
En estos campeonatos Fran cosecha triunfos muy importantes en su formación pues suele alcanzar siempre el podio con puestos muy meritorios.
El kárate como modo de vida
Para el entrenador de Fran, lo más importante no son los logros deportivos. «Su vida cotidiana al menos hasta el momento está en torno a su entrenamiento, lo realiza los martes y jueves con dos horas diarias, donde aprende los valores que tiene el Karate-do: respeto, humildad, compañerismo y esfuerzo para mejorar cada día un poco más», añade Manolo Enjuto.
Además realizó varios cursos de jardinería y de horticultura; de hecho trabajó durante 6 años en una empresa de envasado de hortalizas y todo esto lo combinó con el deporte, lo cual es aún más meritorio.
Opinión que comparte la hermana de este avilesino. «Estoy muy agradecida a todos los entrenadores que ha tenido Fran. Han hecho de él un gran deportista», recuerda Sole Tellado que valora sobre manera la dedicación de Manolo Enjuto hacia su hermano: «El kárate y Manolo Enjuto han hecho de Fran un buen deportista, un buen compañero y un buen ciudadano».