El tenis de mesa español ha arrancado con buenas sensaciones y resultados positivos una nueva temporada, que se presenta clave de cara al proceso de clasificación para los Juegos Paralímpicos de París 2024. Un año más, el Palacio de Deportes y Congresos de Platja d’Aro (Girona) ha acogido el Open Costa Brava, la segunda cita internacional del curso, que cuenta con la participación de los mejores palistas del mundo. Y España ha dejado su impronta tras cosechar siete medallas (un oro, una plata y cinco bronces) en la prueba individual.
Dos bronces llegaron en clase 6 por medio de Álvaro Valera, quien sigue demostrando la enorme calidad que atesora pese al empuje de sus rivales y a las limitaciones físicas que viene experimentando, y de Alberto Seoane. El sevillano desplegó un gran nivel para vencer por 3-1 al alemán Benedikt Muller y por 3-0 al portugués Mario Joan Bastardo en la fase de grupos. En cuartos se aseguró un puesto en el podio al superar por 3-0 al japonés Takuro Chihara. Solo se vio frenado en semifinales por el italiano Matteo Parenzan (2-3), vigente campeón del mundo, aunque vendió cara su derrota.
Precisamente, ante el mismo adversario cayó Seoane en su debut (1-3), aunque un triunfo por 3-0 con el noruego Krizander Magnussen le clasificó para cuartos, donde tumbó al alemán Thomas Rau (3-0). En semis no pudo con el actual número uno mundial, el danés Peter Rosenmeier (1-3), y tuvo que conformarse con un bronce que le deja buen sabor y puntos para escalar puestos en el ranking.
Otro bronce se colgó Alejandro Díaz en clase 8. El joven ibicenco, oro por parejas en los Juegos Paralímpicos Europeos de la Juventud en Pajulahti (Finlandia) el verano pasado, fue segundo de su grupo al ganar al indio Prakhar Sharma (3-0) y al británico Ryan Joseph Henry (3-1), y perder con el israelí Zeev Glikman (1-3). En cuartos de final remontó el duelo con el japonés Arufuahirokazu Tateishi (3-1) y después perdió con el francés Clement Berthier (1-3).
Ander Cepas fue una de las revelaciones del circuito en 2022, logrando ocho medallas internacionales y doblegando a rivales de enjundia que confirman su enorme talento y progresión. El donostiarra ha conquistado el oro en clase 9 tras una brillante actuación. Lideró su grupo con dos triunfos por 3-0 frente al checo David Pulpan y al británico Joseph William Crouse. En cuartos derrotó con el mismo resultado al nipón Hayuma Abe y en semis a otro jugador japonés, Koyo Iwabuchi, tras remontar en el último set (3-2).
En la final le esperaba su compañero Jorge Cardona, quien después de estar apartado de las mesas durante más de año y medio por una lesión del tendón de Aquiles, ha regresado con brío, como ya demostró en el Mundial de Granada, donde rozó las medallas, y ahora con una plata.
En Platja d’Aro ganó al checo Jan Muska (3-0) y al japonés Hayuma Abe (3-1) en la fase inicial, después en cuartos se impuso al indio Dattaprasad Jotiram Chougule (3-1) y 3-0 al galo Lucas Didier, que fue el verdugo en cuartos del veterano extremeño Juan Bautista Pérez. En la final, ambos deleitaron al público con un partido intenso y muy disputado, aunque Cepas se mostró más acertado en los momentos decisivos para llevarse el encuentro por 3-0 (13-11, 14-12 y 11-8).
El pasado mes de noviembre José Manuel Ruiz se marchó con sabor agridulce del Mundial en su casa tras ser eliminado en primera ronda. Ahora, el palista granadino acaba de empezar el año demostrando que aún tiene mucho que ofrecer y que va a pelear por estar en sus octavos Juegos, por lo que se convertiría en el español con más participaciones en citas paralímpicas. El andaluz logró el bronce en clase 10 tras firmar un buen torneo, siendo primero de grupo con victorias frente al italiano Lorenzo Cordua (3-1), al indio Jagannath Mukherjee (3-0) y al británico Maximilian Cooper Flint (3-0). En cuartos ganó al germano Mio Wagner (3-0) y en semifinales no pudo con el francés Mateo Boheas (0-3).
Y Pilar González también subió al podio con un bronce en clase 6-7. La madrileña, que junto a Cris Rubio rompieron una sequía de 20 años sin representación femenina española en un Mundial, amarró el bronce tras sumar dos victorias en la fase de grupos ante la india Prachi Pandey (3-0) y la noruega Jenny Slettum (3-2). En semifinales perdió con la francesa Morgen Caillaud (3-1). Esta es la tercera presea internacional en su carrera.
A las puertas de las medallas se quedaron varios jugadores tras caer en cuartos de final: Iker Sastre y Miguel Ángel Toledo en clase 2, Iker González en clase 3, y Maialen Etxebeste y Olaia Martínez en clase 8. Roberto Eder Rodríguez (clase 3), que había cuajado una gran fase de grupos con tres victorias, y Gonzalo Rodríguez (clase 7), alcanzaron los octavos de final. Mientras que no pasaron de la primera fase Daniel Rodríguez (clase 2), Joan Pahisa (clase 3), Cris Rubio y Martina Sande, de 14 años (clase 4-5), Daniel Mateo (clase 5), Francisco Javier Gómez y Amalio Castillo (clase 6), Pablo Romero y Antonio José Consuegra (clase 7), Marlon López (clase 10) y Eduardo Cuesta (clase 11), medallista de bronce en el Mundial.