FotoEsport. Después de la actuación protagonizada en la jornada de ayer, el equipo Bonver Dakar Project 521 demostró que, una vez superados los problemas de juventud de los mandos instalados en el volante del Tatra, es un equipo competitivo y con opciones de luchar para estar entre los 15 mejores de la categoría en las etapas.
En la clasificación general la remontada será más complicada, el lastre de las más de 3 horas perdidas en la segunda etapa costará de recuperar. De todas formas queda mucho Dakar por delante.
En la primera etapa disputada en Bolivia, Albert Llovera-Charly Gotlib-Jaromir Martinec (Tatta Jamail T163) llegaron a Uyuni en la 26a posición de la categoría camiones. En esta ocasión para cubrir los 327 km de especial invertieron un total de 5h12’33”, 1h12’ más que los ganadores, el equipo ruso de Kamaz, Nikolaev-Yakoylev-Rybakov.
La categoría de los monstruos del Dakar está dando emoción a la competición. En las cuatro etapas disputadas, cuatro vencedores distintos y además de cuatro marcas diferentes (Man, Tatra, Iveco, Kamaz). Así pues lejos queda el dominio que la marca rusa ejercía sobre sus rivales.
Mencionábamos el miércoles que la latitud sería uno de los obstáculos a batir. Antes de iniciar la especial Charly Gotlib tuvo problemas para encontrar medicación para superar posibles problemas, este era su comentario: «No tienen una botella de oxígeno para nosotros. Hoy (jueves) pilotaremos de manera habitual a 4000 metros de altitud y en algún punto concreto superaremos los 4500, es importante llevar oxígeno y algún medicamento para tratar cualquier imprevisto que salga a consecuencia de la altura».
Visto el ritmo de carrera que han llevado Llovera y sus compañeros, parece evidente que no ha hecho falta ninguna ayuda en forma de medicamento para superar la etapa, según el piloto andorrano: «Todo se ha desarrollado de manera perfecta, hemos mantenido un buen ritmo durante toda la jornada que nos ha llevado ha conseguir la mejor clasificación de esta edición del Dakar».
Llovera también se mostraba satisfecho por haber llegado temprano a la asistencia: «Llevamos dos días de competición y los técnicos del equipo tendrán una margen de tiempo importante para darle un buen repaso a nuestra mecánica y así poder salir mañana con las mejores expectativas».
Hoy se está disputando la 6a etapa, 2ª en Bolivia, con salida y llegada a Uyuni. La categoría de camiones tendrá un recorrido diferente al de las otras categorías. En total deberán cubrir 895 km, de los cuales 295 km seran de velocidad.
Se apuntan como principales obstáculos que se encontrarán los participantes, un día más la altitud y los cambios constantes de pistas que obligan a los pilotos a variar el ritmo constantemente. Esta etapa con lluvia puede tener consecuencias imprevisibles. Llovera pasó uno de los momentos más duros del Dakar 2015 en esta zona.