El podio se ha teñido de la bandera de España en el Campeonato de Europa de tiro olímpico en Osijek (Croacia). En la prueba de carabina de aire de pie a 10 metros para personas con discapacidad visual, Sonia Rivero se ha colgado la medalla de plata y Ager Solabarrieta se ha llevado el bronce.
La malagueña, albina de nacimiento, ha firmado una actuación destacada desde la fase clasificatoria, donde logró el cuarto mejor registro con 565.3 puntos. Ya en la final, guiada por Antonio Jesús Arrabal, salió decidida a todo y comenzó liderando la tabla con precisión quirúrgica, apoyada en su impecable técnica y en una confianza que parecía inquebrantable.
Sin embargo, en los últimos disparos, fue superada por la polaca Barbara Moskal, que se alzó con el oro tras hacer 218.8 puntos. Rivero terminó segunda, sumando 214.3 puntos y asegurando así una valiosa medalla de plata continental.
Acompañando a la andaluza en el podio, el vasco Ager Solabarrieta, bicampeón mundial, logró el bronce tras una competición muy reñida. Con Maite Badiola como guía, fue el mejor en la ronda clasificatoria con 582.4 puntos y llegó a liderar la final durante varios tramos, aunque cedió ante el empuje de Moskal y su compañera de selección.
Cuarta medalla europea para la malagueña
Para la tiradora malagueña, este metal supone la cuarta medalla de su carrera en campeonatos europeos. Regresó al panorama competitivo en 2019, tras un parón de 15 años después de ser madre por segunda vez, y no ha dejado de sumar éxitos desde entonces. Ya en 2022 conquistó la plata en el Europeo de Hamar (Noruega), reeditando su presencia en el podio casi dos décadas después de sus triunfos dorados en Francia 2002 y Austria 2003.
Rivero descubrió su pasión por el tiro olímpico en 2001, durante un taller organizado por la ONCE en Málaga. Aquel primer contacto con una carabina, sin experiencia previa, fue suficiente para despertar una vocación que la ha llevado a lo más alto del deporte.
Las pruebas de tiro con carabina para personas ciegas utilizan tecnología de precisión: una mira especial convierte los reflejos de la luz en señales auditivas, que los tiradores interpretan a través de unos auriculares. Cuanto más agudo el sonido, más centrada está la carabina en la diana. Así, oído y concentración suplen a la vista en esta disciplina de altísima exigencia.




