Nueva temporada y nada ha cambiado en competición para la dupla Susana Rodríguez-Sara Löehr, que todo lo que toca lo convierte en oro. Llevan cuatro años invictas, nadie les discute su reinado en categoría PTVI (ciegas o con discapacidad visual), siendo las vigentes campeonas paralímpicas, del mundo y de Europa. En las Series Mundiales de Yokohama, precisamente el escenario donde empezó en 2019 la imbatibilidad de la viguesa, han conquistado la presea dorada.
La gallega y la catalana, que forman una pareja sólida y de gran talento, han hecho sonar el himno español en 13 pruebas consecutivas, con tres títulos mundiales y el oro en los Juegos de Tokio 2020 como principales lauros. En territorio japonés han vuelto a imponerse con mano de hierro bajo una lluvia incesante que hacía que las condiciones fueran muy duras, sobre todo, en el segmento del ciclismo, ya que el circuito contaba con bastantes giros y curvas cerradas.
Fueron las más rápidas en los 750 metros de natación, en la bicicleta mantuvieron la primera posición y en los cinco kilómetros de la carrera a pie fueron las únicas que corrieron por debajo de los 20 minutos. Susana y su guía cruzaron la meta con un tiempo de 1:03.59, aventajando en más de seis minutos a las segundas clasificadas, las estadounidenses Hermes McClain y Kirsten Sass. El bronce fue para las canadienses Jessica Tuomela y Emma Skaug. Buen inicio de curso para las españolas, que ya tienen fijado su próximo reto, revalidar la corona en el Europeo de Madrid en junio.
“Las sensaciones han sido buenas en todos los segmentos. Japón es una tierra estupenda para mí porque me gusta la cultura, su gente amable y deportivamente se me ha dado bien en todas mis visitas. En esta prueba no estaban mis dos máximas rivales -la francesa Annouck Curzillat y la británica Alison Peasgood-, pero es un buen punto de partida para seguir trabajando de cara a las próximas pruebas. Me veo mejor que el año pasado, que fue complicado para mí, pasé por una situación de burnout -síndrome de desgaste profesional- y es algo difícil de gestionar. Estoy contenta de haber ido dando pasos para recuperarme y eso es lo que me hace más feliz ahora mismo”, ha recalcado la viguesa.
La otra medalla de la ‘ParaTriArmada’ la firmó Cristina Miranda en PTS5 (discapacidad física más leve), la cuarta que consigue en su trayectoria internacional. La extremeña acabó con 1:17.31, por detrás de la francesa Gwladys Lemooussu (1:09.46). A las puertas del podio se quedó el andaluz Rafael Cabello y su guía Adolfo Jiménez, cuartos en PTVI con 1:02.30, a medio minuto del bronce. En la misma categoría, Abel Torreblanca y José Antonio Hoyos fueron séptimos (1:04.38).
En PTS4 (discapacidades moderadas) el balear Nil Riudavets terminó quinto con 1:02.03, a 20 segundos de los puestos de medallas, mientras que el salmantino Álex Sánchez Palomero fue sexto con 1:02.15. En la sexta posición también finalizaron Rakel Mateo en PTS2 (discapacidad física severa) y el extremeño Kini Carrasco en PTS3 (discapacidades significativas). Cristian Pérez fue undécimo en PTS5 y Carmen González (PTS4) fue descalificada porque no se detuvo en el penalty box.