Siete años después, el Mundial de triatlón paralímpico regresa a Australia, y lo hace en Wollongong, una vibrante ciudad costera donde el deporte se respira en cada rincón. Allí, del otro lado del mundo, siete triatletas españoles lucharán este sábado por estar entre los mejores y, de paso, abrir con fuerza el ciclo hacia Los Ángeles 2028.
Con tres medallistas paralímpicos entre ellos, el equipo español aterriza en Oceanía con experiencia y ambición. El trazado no dará tregua: 750 metros de natación entre el puerto y mar abierto, 20 kilómetros en bicicleta por un recorrido rápido, sinuoso y con ligeros desniveles, y una carrera a pie de 5 km por Marine Drive que bordea la costa.
Eva Moral, con la handbike a punto
En categoría PTWC (deportistas en silla de ruedas y handbike), Eva Moral llega como una de las favoritas. La madrileña, vigente campeona de Europa y plata en las Series Mundiales de Taranto, reconoce el desgaste del año, pero también su ilusión por competir en un país especial para ella. Tendrá enfrente a la australiana Lauren Parker, campeona paralímpica y estrella local.
“La temporada se ha alargado, va pesando, pero estoy con muchas ganas. Australia me encanta. Espero que salgan a relucir los entrenamientos de este último mes que han ido muy bien. Y con el plus que me va a dar el haberme centrado en la handbike porque este año competí en el Mundial de ciclismo en agosto”, ha comentado.
Lionel Morales, entre cambios
En PTS2 (deportistas con discapacidad física severa que compiten de pie), Lionel Morales buscará reencontrarse con su mejor versión tras un año en el que ha sufrido molestias físicas. El lanzaroteño, habitual entre los favoritos, tendrá a rivales durísimos como el francés Jules Ribstein y los estadounidenses Mohamed Lahna y Mark Barr.
“Este año ha sido de cambios en mi vida. En el último mes me he preparado bien para llegar en las mejores condiciones posibles. No me encuentro como en otros años, decidí bajar un punto en el ritmo de preparación. A ver qué puedo hacer en el campeonato”, ha confesado.
Dani Molina, el campeón quiere reinar de nuevo
Dani Molina, oro paralímpico en París en PTS3 (discapacidades físicas significativas), cinco veces campeón del mundo y siete de Europa, encara Wollongong tras una temporada que define sin rodeos como “un infierno”. Una caída en marzo le dañó el hombro izquierdo, lo dejó tres meses sin correr y nadando con un solo brazo.
Pero la bestia volvió. Bronce en el Europeo y oro en la Copa del Mundo de Alhandra, ahora quiere su sexto oro mundial: “Tengo las mismas ganas que antes de París. He trabajado como un animal. El que quiera ganarme, tendrá que sufrir”.
En PTS4 (discapacidades físicas moderadas), el balear Nil Riudavets es otra de las bazas españolas para las medallas. Bronce en los Juegos y con podios esta temporada en Taranto, el Europeo y Alhandra, se planta en Australia con confianza. Tendrá enfrente a los franceses Alexis Hanquinquant, Pierre-Antoine Baele y Antoine Lamarche, y al estadounidense Clough.
“Encaro el Mundial con mucha ilusión y con ganas de volver a encontrarme con mi mejor nivel. Empecé la temporada con buenos resultados, pero no plasmé toda la mejora que llevo este año. Ahora sí llego en el mejor estado de forma que he tenido nunca. Voy a competir con los mejores. Quiero estar luchando por conseguir el mejor puesto posible”, ha recalcado.
Susana Rodríguez-Sara Pérez, a por otro oro
En PTS5 (discapacidad física más leve) estará Andrea Miguélez. Y en PTVI (ciegos o con deficiencia visual) España contará con dos parejas. En categoría femenina competirán las máximas favoritas, Susana Rodríguez y su guía Sara Pérez. Las campeonas paralímpicas, del mundo y de Europa, están preparadas para defender su reinado.
“Me gusta el circuito y estoy con ganas de competir en Australia, país que siempre organiza muy bien los eventos. Es lejos, pero suele merecer la pena porque valoran mucho al deporte y a los deportistas. Por el momento este año ha ido bien a pesar de que tuve en abril una taquicardia por la cual me tuvieron que hacer una ablación cardiaca y me hizo perder un poco el ritmo de los entrenamientos. Intentaremos como siempre estar lo más arriba posible”, ha declarado la gallega.
En la categoría masculina de PTVI estará Héctor Catalá. El valenciano vivió el pasado año uno de los momentos más duros al quedarse fuera del podio en París por una caída. Pero encontró en su nuevo guía, Diego Méntrida, una chispa renovada.
“Con Diego fue afinidad extrema desde el primer momento. Después de París no sabía qué me deparaba el futuro. Y cuando menos lo esperas, te llega una oportunidad. Llegamos sin presión, muy bien preparados. Nuestra categoría está muy apretada, desde el segundo al octavo estaremos en el mismo minuto. Esto se decidirá por detalles. Queremos estar lo más arriba posible y disfrutar”, ha apuntado.




