Transportes ha recibido 10 reclamaciones de usuarios por la imposibilidad de acceder al transporte con estos vehículos
dxtadaptado.com. La Comunidad de Madrid modificará la normativa para permitir el acceso de scooter para personas con movilidad reducida en los autobuses interurbanos. La decisión se ha tomado tras analizar y recibir más de una decena de reclamaciones de viajeros con este tipo de silla que no podían utilizar el transporte público ante la falta de regulación.
Entre ellas, se encuentra la de Juan Manuel Montilla, conocido como ‘El Langui’. Esta misma tarde el actor y cantante ha mantenido una reunión con el consejero de Transportes, Vivienda e Infraestructuras, Pedro Rollán sobre este asunto, que está siendo estudiado ya desde hace meses por el Consorcio Regional de Transportes.
Según se informa en una nota de prensa, Rollán ha incidido en que es fundamental garantizar la seguridad tanto de las personas que utilizan estas scooter para desplazarse como la del resto de viajeros. Debido a esto es necesario adaptar el transporte y poder acabar con el vacío legal que, hoy por hoy, existe en la Comunidad de Madrid, al igual que en otras grandes ciudades como Barcelona o París.
El objetivo del Gobierno regional es que las personas con movilidad reducida no encuentren problemas para desplazarse en los autobuses interurbanos, que actualmente son accesibles al 100 por 100 para las sillas de ruedas tradicionales, no así para estos últimos modelos motorizados, cada vez más comunes.
La Comisión Técnica de Accesibilidad de Modos de Transporte en la que participan diferentes entidades relacionadas con personas con problemas de movilidad trató ya este asunto. Durante el encuentro del pasado viernes 5 de febrero, se emplazó a la siguiente reunión, que se celebrará en los próximos días, para afrontar una regularización de esta situación.
Al mismo tiempo, el Consorcio Regional de Transportes se reunirá con el Comité Español de Personas con Discapacidad (CERMI) para consensuar las medidas que se puedan poner en marcha de forma inmediata. El objetivo es evitar situaciones como las ocurridas con distintos viajeros que intentaron, sin éxito, acceder a los autobuses con sillas motorizadas.
Actualmente los autobuses no están dotados de anclajes para este tipo de vehículos, sí para las tradicionales sillas de ruedas, por lo que ante una maniobra brusca del autobús o una frenada, tanto la persona que utiliza la scooter como el resto de los viajeros pueden sufrir daños.
Además, estas sillas tienen mayor peso y pueden afectar al funcionamiento de la rampa de acceso o incluso presentar problemas de espacio si no cuentan con suficiente radio de giro dentro del autobús.
