coldeportes.gov.co – Fue el mensaje de felicitación escuchado por miles de colombianos a través de la televisión que en directo le mostró al país la alegría de los deportistas en el desfile que abrió el acto de clausura de los juegos, desde Cúcuta, la ciudad que volcó su potencial humano, técnico, administrativo, gubernamental y dirigencial a favor de la noble causa del deporte.
La melancolía invadió la tribuna de la “Toto Hernández” en la ciudad fronteriza, cuando entre luces, danzas, música y arte, fueron despedidos unos juegos que pasan a la historia porque reflejaron la igualdad entre lo convencional y lo paranacional, ofreciendo idénticas oportunidades, importancia, desarrollo y atención.
Así quedó reflejado en los esquemas del cierre entre fiesta y protocolo, con homenaje a los atletas y a los voluntarios y el premio a los reyes de la prueba de maratón con la cual cayó el telón de los Paranacionales.
La bandera de Coldeportes, el compromiso para la siguiente cita, se le trasladó al Tolima que con bunde y sanjuanero recibió el honor y el compromiso, antes de la extinción del Fuego Deportivo, que regresa a la Sierra Nevada de Santa Marta, a Nabusímake, donde nació hace mes y medio y donde volverá a reposar hasta las siguientes justas.
Como dijo el presidente de la república, “concluyen días de sueños y de esfuerzos, días de dura disciplina, de entrega, porque el deporte es alimento para el alma, templa el carácter y enaltece el espíritu”
